El otoño también es un momento bonito en mi huerto urbano.
El fresal que hace unos meses estaba bastante raquítico se está reproduciendo a toda velocidad y ya son muchos los pequeños fresales que tengo que repartir entre amigos y conocidos.
Ya he recogido algún rabanito y otro muchos sembrados hace mes y medio están creciendo a buen ritmo. Igual que las zanahorias.
Y nuevos rabanitos y zanahorias han sido ya plantados.
Incluso me he sorprendido con la presencia de nuevos pimientos.
La buganvilla está más bonita que nunca, con flores y flores que no paran de crecer.
Y el otoño empieza a hacer mella en el bosque de ginkgos, con las hojas volviéndose poco a poco amarillas e incluso desprendiéndose ya de algunas.
Ah, otoño, dulce estación.
Pero yo aún tengo ganas de playa.
Coincido con tus estaciones favoritas, y en el mismo orden.
ResponderEliminarUna cosa que me encanta del otoño es su color: ese naranja tirando a color tierra.
Me alegro que coincidamos. =)
EliminarEl color del otoño es maravilloso. Qué luz. En eso no puede competir ni el verano.