Este es un libro que, a priori, no me hubiera leído. Bueno, miento, este es un libro que probablemente me hubiera traído un día mi hermana la gafapasta y me hubiera dicho “Tienes que leértelo”. Yo le hubiera dicho “Pero no será de amor y cosas de esas, ¿no?”. Y ella me mentiría y me diría “No, claro que no”. Luego, lo hubiera tenido algunas semanas (o meses) junto a la tele (que es donde pongo los libros que me dejan) y, en algún momento, en un instante en que realmente hubiera creído que no me mentía, me lo hubiera leído. Después, se lo hubiera devuelto y le hubiera dicho “Me mentiste, sí que era de amor y cosas de esas”. Y ella hubiera replicado “¡Que no es de amor!”. Así es como funciona nuestra relación fraterno-literaria.
Pero ha sido el segundo libro elegido por votación popular para la II lectura conjunta organizada por Lady Boheme, así que aproveché que mi hermana lo tenía, se lo pedí prestado y me leí por voluntad propia. Inaudito, vamos.
El libro cuenta la historia de Jasmine, una mujer recién divorciada que viaja a una pequeña isla lluviosa para hacerse cargo durante un mes de la vieja y polvorienta librería de su tía Ruma. La vuelta a su pasado, el enfrentarse a su corazón herido, sus intentos de modernizar la librería, su relación con los locales marcan una historia con tintes sobrenaturales y sí, románticos. Es un libro sencillo, que se lee muy rápido, yo me lo he leído prácticamente todo entre la ida y la vuelta de un viaje relámpago a Bruselas, pero también es un libro completamente previsible. Al menos para mí. No me ha sorprendido nada, nada del libro, cualquier cosa que ocurría me la esperaba, cualquier sorpresa nueva me la venía venir. No sé si eso es bueno o malo. A mí no me ha aportado nada especial, precisamente por eso, es como si lo hubiera escrito yo misma, casi me lo sabía de memoria sin haberlo leído antes. Tiene alguna descripción bonita y alguna frase que me he apuntado, pero creo que no se le saca todo el jugo que se le podría sacar a una historia con las premisas que tenía ésta. No me ha gustado especialmente, me ha parecido demasiado simple y superficial, casi obvio, pero realmente era lo que me esperaba de él en cuanto empecé a leerlo, así que no ha sido una sorpresa.
Eso sí, me ha entretenido el viaje a Bruselas. Y como es cortito y se lee rápido tampoco tengo la sensación de que he perdido el tiempo. Además, el toque sobrenatural tiene su punto.
Pues, precisamente este libro, no te lo hubiera dejado voluntariamente. Es flojillo. También creo que se le podía haber sacado más jugo.
ResponderEliminarUn dIa te dejaré uno de amor de verdad. Ya verás. XD XD
Vale, haré como que te creo. Raro que estemos de acuerdo.
Eliminar