Este mes sólo he actualizado el blog una vez. Y no me parece bien. No ha sido por nada especial, pura vaguería estival. Así que voy a ver si voy poniéndome las pilas, porque tengo muchas entradas pendientes de publicar que no quiero que queden condenadas al olvido de la carpeta de borradores.
Empezaremos por los libros. Llevo cuatro meses sin escribir ninguna reseña de libros y no es porque no haya leído nada, justo al contrario: he leído más en estos cuatro meses que en los primeros cuatro del año, pero por unos motivos o por otros, no he escrito sobre ellos. No escribir sobre “Th1rteen R3asons Why” fue, al principio, deliberado: quería esperar a ver la serie basada en el libro antes de comentarlo, pero aún no la he acabado, así que me lanzo a escribir sobre el libro y sobre la serie ya escribiré. O no. Creo que la historia de “Por trece razones” ya es sobradamente conocida: una adolescente norteamericana se suicida y graba en cintas de casete los motivos que le han llevado a ello, dirigidas a las trece personas que han influido en su decisión. El libro me gustó mucho, aunque trata un tema duro y difícil, me resultó interesante y me parece adecuado que haya libros que traten sobre este tema. En realidad no es un libro sólo sobre el suicidio, es sobre la difícil etapa de la adolescencia, sus problemas (aparentemente insignificantes para muchos adultos), las relaciones que se establecen y lo mucho que pueden llegar a afectar las cosas que ocurren. Según lo leía, pensaba “uff, tampoco es para tanto”, pero claro, yo soy una adulta, no una adolescente insegura (que es lo que somos todos de adolescentes), así que intenté recordar lo que vivía y sentía yo de adolescente. Y sí, cuando eres adolescente TODO es para tanto, todo se vive de una manera muy diferente a cuando eres adulto y no siempre encuentras el apoyo y la comprensión de esos adultos que teóricamente, deberían ayudarte, porque han pasado por lo que tú has pasado y han sobrevivido.
Es un libro que creo que está muy bien leer siendo adulto, para recordar lo que era ser adolescente y acercarte a ellos. Y creo que también está bien leerlo de adolescente porque seguro que en algún momento te sientes identificado con alguno de los personajes y eso siempre ayuda.
Sobre la serie… Bueno, sólo he visto la mitad de los capítulos, no debería opinar mucho pero opinaré. La serie me gusta, pero no es el libro. Se basa en el libro pero es muy diferente. En el libro, Clay, el protagonista, escucha todas las cintas en una noche, sin poder enfrentarse en ningún momento a los protagonistas de las cintas. La serie se basa en gran parte precisamente en eso: en sus encuentros cara a cara con los que aparecen en las cintas, en cómo son sus reacciones y sus comportamientos tras la muerte de Hannah. El libro es la historia de Hannah y el por qué de su suicidio. La serie se está liando un poco y está yendo más allá de eso. Aunque aún no he llegado al final, ya me he enterado que hasta la muerte de Hannah es diferente. Y que está prevista una segunda parte de la serie. En fin, que la serie está bien, pero creo que la han convertido más en una historia de misterio e intriga que en una historia de los problemas de los adolescentes. Supongo que la acabaré de ver, pero son historias distintas.
Pues vaya, al final sí que he hablado sobre la serie. Es que lo tenía que decir.
Yo le echo la culpa de la pereza bloguera al móvil... no soy tan "ágil" con el móvil como para escribir entradas, pero como me da acceso a todo lo demás no suelo sacar el ordenador...
ResponderEliminarTenía pensado ponerme con esa serie un día de estos, pero ahora que sé que está basada en un libro, creo que prefiero leer la historia a verla. Lo que me da es un poco de susto que sea demasiado dura... yo es que soy muy llorica, me temo :(
Yo entre el móvil y la tablet es verdad que saco menos ahora el ordenador... pero todo es ponerse.
EliminarNo te creas, el libro no es tan duro. A ver, la historia lo es, pero yo creo que vale la pena leerlo. La serie sí que juega más con nuestra fibra sensible.
Yo soy de las que aún no ha leído ni el libro ni visto la serie. No he visto la serie porque quiero leer el libro, pero tengo muchos pendientes, y así...
ResponderEliminarMe alegro que vuelvas al blog, yo estoy a ver si vuelvo a reseñar, que hace mil años que no lo hago. Estoy más enfocada a escribir ficción y los mamás en apuros (que, por desgracia, no es ficción), y ya no me da la vida para las reseñas...
A cuenta del libro, y de que lo vemos con perspectiva de adulto y pensamos que no es para tanto, no hace mucho leí que sólo el 10% de los adultos recordamos nuestra infancia y adolescencia, y es por eso que es tan difícil crear empatía. O pertenezco a ese 10%,y recuerdo perfectamente esa etapa tan dura, en la que la inseguridad está presente en todo momento, y que hay gente que te trata como una niña y otra como una adulta, pero nadie te trata con el respeto que mereces (o no todo el tiempo). Y sí, yo sobreviví, pero me quedaron cicatrices...
Lo cual no me va a ayudar con la adolescencia de MiniP, eso lo tengo claro. 🙈 ¡La que me espera!
¡Besotes!
El 10% me parece poquísimo, pero lo creo totalmente. Parece mentira lo difícil que es empatizar con una fase de nuestra vida por la que todos hemos pasado. Yo creo que sí que te va ayudar mucho con la adolescencia de MiniP, porque tú si recuerdas lo que fue esa fase y sí que podrás empatizar, no te parecerá que lo que vive es de extraterrestres. Seguro que será una fase interesante.
Eliminar¡Besos!